Visitar Los Cabos es sinónimo de maravillosos paisajes, hermosas playas y una vibrante vida nocturna para disfrutar con amigos. El destino ofrece bares y pubs que van desde las legendarias cantinas hasta bares de lujo que sirven las bebidas más famosas de México: el tequila y el mezcal.
El origen de estas bebidas ancestrales de agave se remonta a 250 a.C. Los aztecas produjeron pulque, esta bebida fermentada era usada para ceremonias y rituales; después de la conquista española comenzó la destilación de agave, dando origen al tequila y al mezcal.
Si bien todo el tequila es mezcal, no todo el mezcal es tequila. La diferencia proviene de la planta de agave, con aproximadamente 290 especies diferentes. El tequila está elaborado específicamente de agave azul y toma su nombre del Valle de Tequila. Este se produce al cocinar el agave dentro de grandes hornos antes de ser destilado al menos un par de veces en ollas de cobre.
El mezcal todavía se hace de la misma manera que se elaboraba hace doscientos años, básicamente con cualquier tipo de agave. Antes de ser destilado, se cocina en pozos de tierra con leña y carbón; el elíxir suele ser más ahumado, más rico y más dulce que el tequila.
Para una experiencia de degustación de alto nivel de estas bebidas espirituosas tradicionales, mis sitios favoritos para degustar los mejores son:
The Cape, un resort que ofrece la única terraza bar y lounge con vistas asombrosas del centro de Cabo San Lucas y El Arco, así como de impresionantes puestas de sol, con una decoración tropical elegante y rodeado de verdes jardines y agua que fluye. Su menú ofrece cocteles y cervezas artesanales de la región. Su bebida insignia: un mezcal con infusión de hierbas con piña y toronja.
El bar y restaurante del Acre, rodeado de espacios suntuosos y abundante vegetación, ofrece un innovador programa de cocteles en un ambiente refinado y sereno. Un área de degustación muestra mezcales únicos que son las estrellas del menú. Entre mis favoritos están el Perla de la Baja con mezcal, tequila, piña, lima, maracuyá, miel de verbena y amargo de angostura; otro de mis favoritos es el Beso de Katrina con mezcal, limón, piña, hibisco y orégano.
Agua by Larbi en One & Only Palmilla es el lugar ideal para una cena romántica a la luz de las velas. El bar ofrece vistas a la piscina infinita y al hermoso mar. Las especialidades mexicanas hechas en la mesa y los licores de agave junto con los toques de arte mexicano crean un ambiente exclusivo en el bar estilo palapa, ideal para tomar una refrescante bebida al atardecer.
La Biblioteca de Tequila cuenta con más de 350 tipos de licores de tequila, mezcal y agave, ofrece auténticas delicias mexicanas que equilibran la tradición con un toque moderno en un ambiente relajado y acogedor decorado con barriles de tequila. Una terraza al aire libre con El Arco y la marina como fondo es perfecta para disfrutar las impresionantes puestas de sol.
En Grand Velas Los Cabos, el salón de degustación que lleva por nombre Tequila & Mezcal incluye 140 variedades diferentes; en este espacio —con una decoración contemporánea ultra cálida y una vista impactante al mar desde su terraza— te enseñan no solo a degustar correctamente estas bebidas, sino también la historia que hay detrás de cada uno, lo que enriquece la experiencia todavía más. El resort también cuenta con la selección más grande de vinos de la región y ofrece catas de vinos mexicanos, así como un curso de certificación de tres días dirigido por el maestro sommelier Don Pedro Poncelis Brambila.
Si has visitado alguno de estos lugares, ¡cuéntanos tu experiencia!
Por Luz Cullison