Como todos los años, Los Cabos es el hogar preferido de las ballenas grises que emigran desde muy lejos con el fin de concluir su ciclo reproductivo en las aguas del océano Pacífico. Estas especies recorren más de 16,000 mil kilómetros desde el Círculo Polar Ártico a través de las costas de Alaska, Canadá, Norte de Estados Unidos y California hasta llegar a este cálido destino.
Para los turistas, presenciar a las ballenas grises es una experiencia fantástica, ya que estas criaturas se acercan a las embarcaciones, asoman la cabeza, salpican, saltan y levantan su cola para saludar a los pasajeros. Cabe recalcar que solamente se puede adquirir este tour mediante prestadores de servicios turísticos.
Estos gigantes suelen medir 15 metros de altura y pesar hasta 30 toneladas, mientras que sus crías miden entre 4 y 5 metros con un peso de 750 kilos. En el mar sudcaliforniano también se pueden contemplar otras especies como tortugas, delfines y lobos marinos, además de otras aves migratorias tales como garzas, patos y gaviotas.
El tour de ballenas grises es una mágica experiencia especialmente si se acerca una madre con su ballenato a la embarcación. Admirar a estos grandes mamíferos es una oportunidad única que no te puedes perder. La temporada para disfrutar este espectáculo empieza en diciembre y termina en abril, y por lo general las expediciones arrancan a partir de las 8:00 a.m.